Todos los resultados en los demás encuentros se ponían de cara para mantenerse en los puestos privilegiados de la categoría, pero dos tiempos completamente distintos de la U.D. RINCONADA, deja si cabe, al Club rinconero prácticamente sin opciones de ascenso.
Los primeros veinticinco minutos no mostraban un claro dominador del encuentro, hasta que los blanquiazules, ayer de naranja, fueron conntrolando todas las lineas y trabajando con mucho orden, tanto en defensa como en ataque, teniendo incluso hasta tres claras ocasiones de gol, que no llegaría gracias, unas veces a la gran labor del portero del Barrios Unidos, que sacó en dos ocasiones con el cuerpo unos goles que ya se cantaban en la grada, así como un paradón que hizo al borde del descanso, sacando una mano milagrosa para desviar un remate de cabeza que se colaba por su palo izquierdo. Fueron los veintinco minutos más intensos de los hombres de Millán, quienes reclamaron también dos penaltis, uno de ellos clarísimo que el colegiado no señaló.
En la segunda mitad los nuestros seguían intentándolo hasta el minuto 58 de partido cuando Emi adelantó a la U.D. RINCONADA en el marcador poniendo el 0-1. Fue a partir de ese momento cuando cambió la imagen del equipo rinconero. El Barrios Unidos sabedor de que tenía que irse arriba para remontar el partido, le ponían intensidad y un plus de agresividad en las jugadas que no se correspondía con lo que se veía de una escuadra rinconera, que parecía no encontrar el sitio correcto en sus lineas a la hora defender. Tanto fue así que once minutos después de ponerse por delante en el marcador, empataba el Barrios Unidos, que no se conformaba con un punto y que quería más, consiguiendo su objetivo a falta de siete minutos para el final, por mediación de Chungui, un ex de la U.D. RINCONADA, que incidía una y otra vez por la banda izquierda , hasta que logró su objetivo.
Intentó el quipo de Santa Marta reaccionar antes del final, yéndose arriba con todo, pero no tendría suerte de cara al gol.
Una derrota ante un Barrios Unidos que se presentó al encuentro con muchas bajas, teniendo incluso un banquillo con solo dos hombres, pero que acertaron más de cara a la portería de Andrés, y que pondrían toda la intensidad posible para lograr lo que estaba en juego, los tres puntos tan valiosos para ambos equipos.
Toca parón debido a la Semana Santa y pensar ya en los dos encuentros como local que tiene que disputar ante Cerro y Soleá respectivamente.
